Es un tributo a la transición, un tranquilo emblema del cambio entretejido con hojas doradas, aire fresco y calor que se desvanece. Capta la belleza agridulce de dejar ir: árboles que se desprenden de lo que ya no les sirve, cielos que se oscurecen con la reflexión y el tiempo que se ralentiza hacia la suavidad. En cada color hay una historia de liberación, resistencia y el elegante arte de la transformación.
Es un tributo a la transición, un tranquilo emblema del cambio entretejido con hojas doradas, aire fresco y calor que se desvanece. Capta la belleza agridulce de dejar ir: árboles que se desprenden de lo que ya no les sirve, cielos que se oscurecen con la reflexión y el tiempo que se ralentiza hacia la suavidad. En cada color hay una historia de liberación, resistencia y el elegante arte de la transformación.