Un expresivo geco en vibrantes colores del arco iris llena la imagen con su presencia. La piel del animal está cubierta de zonas de colores vivos y contrastados que van del azul al rosa y al amarillo neón. El gran ojo, de diseño realista, es especialmente llamativo y cautiva la mirada del espectador. Algunos de los colores descienden como pintura líquida, dando al motivo un aspecto dinámico, casi surrealista. El fondo negro realza el efecto de la explosión de color y hace que el geco parezca una obra de arte hecha de luz.
Un expresivo geco en vibrantes colores del arco iris llena la imagen con su presencia. La piel del animal está cubierta de zonas de colores vivos y contrastados que van del azul al rosa y al amarillo neón. El gran ojo, de diseño realista, es especialmente llamativo y cautiva la mirada del espectador. Algunos de los colores descienden como pintura líquida, dando al motivo un aspecto dinámico, casi surrealista. El fondo negro realza el efecto de la explosión de color y hace que el geco parezca una obra de arte hecha de luz.