Cuatro figuras se yerguen sobre paisajes vibrantes y ondulantes, sosteniendo cada una de ellas exuberantes hojas verdes que simbolizan su conexión intrínseca con el mundo natural. Vestidas con atuendos brillantes y estampados, personifican la alegría y la serenidad que otorga la naturaleza. El telón de fondo, un cielo radiante con un sol poniente, acompañado de un gracioso pájaro blanco y volutas de nubes, crea una escena armoniosa y etérea.
Cuatro figuras se yerguen sobre paisajes vibrantes y ondulantes, sosteniendo cada una de ellas exuberantes hojas verdes que simbolizan su conexión intrínseca con el mundo natural. Vestidas con atuendos brillantes y estampados, personifican la alegría y la serenidad que otorga la naturaleza. El telón de fondo, un cielo radiante con un sol poniente, acompañado de un gracioso pájaro blanco y volutas de nubes, crea una escena armoniosa y etérea.