Un símbolo silencioso y llamativo: una serpiente que se muerde la cola, capturando el ciclo del karma y el retorno sin fin. Sus líneas sencillas, sus tonos tranquilos y su sutil profundidad le confieren una sensación a la vez antigua y moderna, un guiño atemporal al equilibrio, la consecuencia y la continuidad.
Un símbolo silencioso y llamativo: una serpiente que se muerde la cola, capturando el ciclo del karma y el retorno sin fin. Sus líneas sencillas, sus tonos tranquilos y su sutil profundidad le confieren una sensación a la vez antigua y moderna, un guiño atemporal al equilibrio, la consecuencia y la continuidad.
Artista, Ilustrador / Pintor / Diseñador Gráfico 🌳
¡Ese soy yo! Actualmente, soy un aprendiz más que otra cosa, bueno en un puñado de cosas como Música, Arte y Cine.