En "Contemplative Beach", un paisaje sereno se despliega con ondulantes colinas pintadas en tonos naranjas, rosas y verdes. Majestuosas palmeras se yerguen como centinelas silenciosos, con sus hojas meciéndose suavemente en el suave cielo verde salpicado de tenues nubes. Sobre la arena de la playa se recuestan dos siluetas: una, con las piernas extendidas y un brazo que sostiene el cuerpo, y la otra, pensativa, con las rodillas flexionadas y una mano apoyada en la barbilla.
En "Contemplative Beach", un paisaje sereno se despliega con ondulantes colinas pintadas en tonos naranjas, rosas y verdes. Majestuosas palmeras se yerguen como centinelas silenciosos, con sus hojas meciéndose suavemente en el suave cielo verde salpicado de tenues nubes. Sobre la arena de la playa se recuestan dos siluetas: una, con las piernas extendidas y un brazo que sostiene el cuerpo, y la otra, pensativa, con las rodillas flexionadas y una mano apoyada en la barbilla.