Un paisaje marino sereno y abstracto con un sol amarillo dorado que se pone sobre un mar de olas tranquilas, rítmicas y azul claro. La paleta de colores apagados y las líneas repetitivas crean un ambiente de profunda tranquilidad y meditación.
Un paisaje marino sereno y abstracto con un sol amarillo dorado que se pone sobre un mar de olas tranquilas, rítmicas y azul claro. La paleta de colores apagados y las líneas repetitivas crean un ambiente de profunda tranquilidad y meditación.
"No sólo pinto sujetos, sino también los ecos que dejan tras de sí. Mi obra es un archivo de sentimientos y tiempo."
Me fascinan infinitamente la memoria, la nostalgia y el modo en que el tiempo tiñe nuestra percepción. Mis cuadros son intentos de capturar estas cosas intangibles, el calor de una tarde olvidada, la atmósfera de un lugar rico en historia o la expresión fugaz de un rostro. Mi objetivo es dar forma física a estos momentos, preservando su huella emocional mucho después de que hayan pasado.