Una obra de arte minimalista al estilo de las xilografías tradicionales japonesas. Tres estilizadas margaritas se alzan erguidas y orgullosas sobre un fondo de textura beige. Los claros contornos negros, la cálida paleta de colores con los centros de las flores amarillas y el sello Inkan rojo de la esquina confieren al motivo una armoniosa mezcla de gracia natural y estética del Lejano Oriente. Ideal como decoración de pared para los amantes del diseño zen, el Japón vintage y los gráficos florales.
Una obra de arte minimalista al estilo de las xilografías tradicionales japonesas. Tres estilizadas margaritas se alzan erguidas y orgullosas sobre un fondo de textura beige. Los claros contornos negros, la cálida paleta de colores con los centros de las flores amarillas y el sello Inkan rojo de la esquina confieren al motivo una armoniosa mezcla de gracia natural y estética del Lejano Oriente. Ideal como decoración de pared para los amantes del diseño zen, el Japón vintage y los gráficos florales.
Toallas de calidad superior
Material
Material
Rizo aterciopelado con una mezcla de 60 % de microfibra y 40 % de algodón.
Detalles
Detalles
Alta calidad combinada con gran absorbencia.
Instrucciones de cuidado
Instrucciones de cuidado
Nuestras toallas no pierden su color y se pueden lavar a máquina a 40 ºC.
Estampado de alta calidad
Estampado de alta calidad
Gran calidad gracias a la sublimación resistente a la luz y a un revestimiento adicional.
Producción sostenible
Producción sostenible
Electricidad verde, pocos desechos y compromiso social.
Hecho en Alemania
Hecho en Alemania
Nuestro socio local de confianza elabora y estampa todas nuestras toallas.
Moqro es sinónimo de una estética atemporal con una presencia tranquila. Cada objeto se selecciona y diseña cuidadosamente para crear una atmósfera que perdure. No se trata de decoración, sino de significado. Las formas se reducen, los materiales se sinceran, el efecto permanece. Inspirado en la claridad japonesa, el resultado es un espacio que no se llena, sino que se siente: un hogar que habla, incluso cuando no hay nadie.