Una figura de la Parca domina la imagen, envuelta en una túnica verde hecha jirones y con un rostro esquelético. El fondo es una mezcla de verde y blanco que sugiere un cielo tormentoso o una niebla etérea. Las manos de la parca están huesudas y extendidas, creando una presencia amenazadora. Debajo, un paisaje borroso con árboles añade profundidad a la escena.
Una figura de la Parca domina la imagen, envuelta en una túnica verde hecha jirones y con un rostro esquelético. El fondo es una mezcla de verde y blanco que sugiere un cielo tormentoso o una niebla etérea. Las manos de la parca están huesudas y extendidas, creando una presencia amenazadora. Debajo, un paisaje borroso con árboles añade profundidad a la escena.