Un gato negro se sienta serenamente dentro de un arco ornamentado, rodeado de plantas exuberantes, creando una escena mística y apacible con un toque de elegancia arquitectónica.
Un gato negro se sienta serenamente dentro de un arco ornamentado, rodeado de plantas exuberantes, creando una escena mística y apacible con un toque de elegancia arquitectónica.
"Cada cuadro es una maleta que deshago de un lugar en el que nunca he estado, pero que de algún modo recuerdo."
Llevo conmigo fragmentos de sueños, esquinas, historias escuchadas. Los convierto en colores y texturas, en paisajes que no existen pero que me resultan extrañamente familiares. Dejo que mi imaginación viaje primero y que mis manos la sigan después.