Ilustración vibrante de una calle estrecha bañada por el sol en una ciudad costera europea, con edificios de colores que descienden hasta el mar azul centelleante.
Ilustración vibrante de una calle estrecha bañada por el sol en una ciudad costera europea, con edificios de colores que descienden hasta el mar azul centelleante.
No hay agenda en mi trabajo. Me fijo en los gestos, los patrones, las contradicciones y los documento en forma visual. A veces es abstracto, a veces figurativo. En cualquier caso, es una especie de estudio. Un testigo silencioso.