Un gato negro está sentado en el alféizar de una ventana, mirando desde una acogedora habitación hacia un exuberante y verde jardín. La escena es una encantadora y apacible representación de los sencillos placeres del hogar y la naturaleza.
Un gato negro está sentado en el alféizar de una ventana, mirando desde una acogedora habitación hacia un exuberante y verde jardín. La escena es una encantadora y apacible representación de los sencillos placeres del hogar y la naturaleza.
"Mi arte no tiene fronteras, está formado por todo lo que he sentido, visto y compartido con el mundo."
Mis creaciones traspasan las fronteras del estilo, el medio y la cultura. Influenciado por todo, desde el arte callejero hasta las formas clásicas, mi trabajo evoluciona con el mundo, celebrando su caos y su armonía.