Una acogedora sala de estar nocturna, con un sofá rosa donde duerme plácidamente un gato. La habitación está llena de libros y plantas, y la ventana revela un cielo nocturno estrellado, creando un santuario perfecto para la lectura nocturna tranquila.
Una acogedora sala de estar nocturna, con un sofá rosa donde duerme plácidamente un gato. La habitación está llena de libros y plantas, y la ventana revela un cielo nocturno estrellado, creando un santuario perfecto para la lectura nocturna tranquila.
"No pinto sólo lo que parezco, sino lo que llevo dentro, crudo y sin resolver."
Cada obra es una huella cruda de mi mundo interior. Dejo que la emoción guíe mi mano, tanto si trabajo con óleo, tinta o una tableta. El género no importa, sino la verdad.