Una vibrante y psicodélica ilustración de la cara de un leopardo, representada en un alboroto de rosas, azules y morados de neón. La composición es una representación salvaje, enérgica y onírica de este poderoso animal.
Una vibrante y psicodélica ilustración de la cara de un leopardo, representada en un alboroto de rosas, azules y morados de neón. La composición es una representación salvaje, enérgica y onírica de este poderoso animal.
"Pinto los trozos de sueños que olvidamos demasiado rápido, los que perduran entre el sueño y la memoria."
Desdibujando la línea entre lo real y lo imaginario, mi arte invita a entrar en espacios liminales. Me atraen las atmósferas surrealistas, los contrastes vibrantes y ese espacio mágico entre la vigilia y el asombro.