Un rostro con ojos arremolinados e hipnóticos y una sonrisa exagerada domina el cuadro. Los colores vivos y los dinámicos trazos abstractos intensifican el enérgico estado de ánimo.
Un rostro con ojos arremolinados e hipnóticos y una sonrisa exagerada domina el cuadro. Los colores vivos y los dinámicos trazos abstractos intensifican el enérgico estado de ánimo.