A Ivan Ballack le gusta capturar en sus fotografías objetos olvidados y abandonados. En sus obras, que se caracterizan por una estética vintage, todo gira en torno al ojo para los pequeños detalles. Ya sea arte callejero, personas, plantas, calaveras o coches viejos, el sudafricano nos permite descubrir tanto la naturaleza urbana como la rural de su tierra natal.