Sarolta Bán, diseñadora de joyas en sus orígenes, decidió probar la manipulación digital de fotografías y descubrió que tenía un don para ello. Afincada en Budapest, la artista combina fotografías de objetos corrientes, paisajes y animales para crear conmovedores paisajes de ensueño surrealistas. Sus obras, oscuras y mágicas, han aparecido en The Huffington Post y se han expuesto en Europa, Japón y Estados Unidos.