"Dibujar es mi forma de hacer sonreír a la gente."
En lugar de seguir la carrera de profesor tras estudiar ruso, Balázs Solti, de Budapest, decidió trabajar como ilustrador independiente. El húngaro trabaja tanto digitalmente como con acrílico o lápiz. Pinta imágenes fantásticas de ensueño, así como situaciones que parecen instantáneas, pero sus motivos favoritos son los animales, a los que da cuerpo humano de dandis, deportistas o punks, o añade accesorios a sus crines: un viaje por el zoo de la cultura pop.