Un bodegón de narcisos amarillos en un jarrón oscuro, con una fuerte sombra proyectada contra una pared morada. La composición es un estudio dramático y malhumorado de la luz, la sombra y las atrevidas formas de las flores.
Un bodegón de narcisos amarillos en un jarrón oscuro, con una fuerte sombra proyectada contra una pared morada. La composición es un estudio dramático y malhumorado de la luz, la sombra y las atrevidas formas de las flores.
"Mezclo pinceladas con algoritmos, recuerdos con movimiento, porque el arte debe evolucionar tan rápido como lo hace el mundo."
Trabajo en la intersección de la tradición y la tecnología, fusionando pinceladas con datos, nostalgia con innovación. Mi arte refleja nuestra cambiante cultura digital al tiempo que se aferra a la profundidad de las emociones humanas.