Un bodegón surrealista y artístico de un jarrón formado por los perfiles de dos rostros. La pieza es una exploración reflexiva, moderna e imaginativa de la conexión, la identidad y el arte.
Un bodegón surrealista y artístico de un jarrón formado por los perfiles de dos rostros. La pieza es una exploración reflexiva, moderna e imaginativa de la conexión, la identidad y el arte.
"Mi estilo cambia como el tiempo, a veces brillante, a veces tormentoso, pero siempre fiel al lugar donde me encuentro."
Sigo mi curiosidad dondequiera que me lleve, desde bocetos a tinta hasta atrevidos abstractos digitales. Creo que el arte debe evolucionar, como nosotros. En constante cambio, pero profundamente personal.