El arte de Nikita Jariwala está fuertemente influenciado por su vida en Suiza y sus viajes con la familia. La naturaleza sigue siendo su fuente de inspiración más poderosa y da forma a la diversidad de sus obras. Trabaja con diversos medios, como acrílicos, acuarelas, carboncillo y pasteles de tiza. Explorando estos materiales, Nikita crea desde serenos paisajes y encantadores retratos de animales hasta decorativas piezas botánicas. Su paleta abarca desde suaves pasteles a tonos vibrantes y atrevidos, dando vida a cada obra con su propia energía. Sus obras aportan color, calidez y una presencia alegre a cualquier espacio.