"Un jugador de baloncesto triunfante, encarnando el espíritu de Michael Jordan, se recorta sobre la silueta de una multitud enfervorizada, con los brazos en alto en señal de victoria, expresando el poderoso sentimiento: 'Algunos quieren que suceda, otros desean que suceda, otros hacen que suceda'". La escena capta la emoción cruda y la determinación de un atleta que ha alcanzado la grandeza a través del trabajo duro y la perseverancia",
"Un jugador de baloncesto triunfante, encarnando el espíritu de Michael Jordan, se recorta sobre la silueta de una multitud enfervorizada, con los brazos en alto en señal de victoria, expresando el poderoso sentimiento: 'Algunos quieren que suceda, otros desean que suceda, otros hacen que suceda'". La escena capta la emoción cruda y la determinación de un atleta que ha alcanzado la grandeza a través del trabajo duro y la perseverancia",