Esta ilustración, un poético homenaje al eterno espíritu de la maravilla, imagina cómo sería el Principito... de mayor. Sigue soñando, sigue observando las estrellas, pero ahora desde el borde de su propio mundo. Con un pañuelo dorado alrededor de los hombros y las galaxias danzando en lo alto, esta obra de arte invita tanto a los niños como a los soñadores adultos a aferrarse a la curiosidad, la bondad y las preguntas cósmicas.
Esta ilustración, un poético homenaje al eterno espíritu de la maravilla, imagina cómo sería el Principito... de mayor. Sigue soñando, sigue observando las estrellas, pero ahora desde el borde de su propio mundo. Con un pañuelo dorado alrededor de los hombros y las galaxias danzando en lo alto, esta obra de arte invita tanto a los niños como a los soñadores adultos a aferrarse a la curiosidad, la bondad y las preguntas cósmicas.
"Creo para aportar suavidad y asombro al mundo de los niños, imágenes suaves que se sienten como una cálida historia susurrada antes de dormir."
Wonderfolk es un mundo visual creado para pequeños soñadores. Cada obra de arte comienza como un concepto cuidadosamente elaborado, una historia visual moldeada por el color, la textura y la emoción. Doy vida a estas historias a través de un proceso que combina la dirección artística, la composición reflexiva y una estética pictórica inspirada en las técnicas tradicionales.
¿El resultado? Escenas suaves y poéticas diseñadas para aportar calma y asombro a los espacios infantiles.
Todas las piezas se seleccionan con sumo cuidado, y nada se incluye en la lista hasta que pasa la prueba de brillo de mi crítico de arte más honesto: Luca, mi hijo de 4 años.