Este cuadro representa una delicada tarta de fresas sobre el fondo de un pintoresco paisaje visible a través de una ventana. Los suaves tonos pastel y la atención al detalle crean una escena serena y acogedora que evoca una sensación de confort y calma.
Este cuadro representa una delicada tarta de fresas sobre el fondo de un pintoresco paisaje visible a través de una ventana. Los suaves tonos pastel y la atención al detalle crean una escena serena y acogedora que evoca una sensación de confort y calma.
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