Una puerta abierta de color amarillo brillante enmarca perfectamente una hermosa vista del mar, veleros y una costa lejana, invitando al espectador a adentrarse en una soleada e idílica escena de vacaciones.
Una puerta abierta de color amarillo brillante enmarca perfectamente una hermosa vista del mar, veleros y una costa lejana, invitando al espectador a adentrarse en una soleada e idílica escena de vacaciones.
"Cada cuadro es una maleta que deshago de un lugar en el que nunca he estado, pero que de algún modo recuerdo."
Llevo conmigo fragmentos de sueños, esquinas, historias escuchadas. Los convierto en colores y texturas, en paisajes que no existen pero que me resultan extrañamente familiares. Dejo que mi imaginación viaje primero y que mis manos la sigan después.