Una tierna ilustración de una mujer pelirroja, abrazada a sus rodillas y rodeada de grandes hojas azules. La escena es una representación bella, amable y ligeramente melancólica de la búsqueda de consuelo en la naturaleza.
Una tierna ilustración de una mujer pelirroja, abrazada a sus rodillas y rodeada de grandes hojas azules. La escena es una representación bella, amable y ligeramente melancólica de la búsqueda de consuelo en la naturaleza.
"En la tranquilidad de la vida cotidiana, encuentro las chispas que se convierten en cuadros, la quietud es mi musa."
Mi trabajo suele comenzar en silencio, observando el viento, las sombras o un día cualquiera. Traduzco estos momentos tranquilos en color y forma, ya sea con acuarela o con lápiz digital.