Un bodegón limpio y moderno de un cuenco a rayas azules y blancas lleno de naranjas brillantes. La composición es sencilla, fresca y tiene un aire clásico, casi mediterráneo, sobre un fondo gris pálido.
Un bodegón limpio y moderno de un cuenco a rayas azules y blancas lleno de naranjas brillantes. La composición es sencilla, fresca y tiene un aire clásico, casi mediterráneo, sobre un fondo gris pálido.
"No pinto sólo lo que parezco, sino lo que llevo dentro, crudo y sin resolver."
Cada obra es una huella cruda de mi mundo interior. Dejo que la emoción guíe mi mano, tanto si trabajo con óleo, tinta o una tableta. El género no importa, sino la verdad.