Un sereno retrato de un rostro azul oscuro con una diadema blanca, enmarcado por exuberantes hojas y plantas de colores. La obra simboliza una mente en paz y en armonía con la naturaleza.
Un sereno retrato de un rostro azul oscuro con una diadema blanca, enmarcado por exuberantes hojas y plantas de colores. La obra simboliza una mente en paz y en armonía con la naturaleza.
"Pinto con la misma libertad que tenía antes de aprender las reglas de la palabra."
Mi arte surge del juego, no de la perfección. Experimento como un niño, garabateando, manchando, probando cosas para ver qué pasa. Algunas obras acaban en desastre, otras en magia. Ambas son valiosas.