Un gato blanco y negro sentado en una terraza con cactus, con vistas al mar azul al atardecer, con pájaros volando contra un cielo rosa y amarillo. Una escena serena y encantadora.
Un gato blanco y negro sentado en una terraza con cactus, con vistas al mar azul al atardecer, con pájaros volando contra un cielo rosa y amarillo. Una escena serena y encantadora.
"Cada pieza que hago es un rompecabezas que no sabía que estaba resolviendo."
No dibujo con un plan. Empiezo con tensión, o silencio, o algo que sentí hace tres semanas. Luego superpongo, borro y reconstruyo. Mi obra refleja el desorden que hay bajo la superficie: crudo, cambiante, inacabado, como todos nosotros.