Ilustración de un gato negro sentado sobre una alfombra estampada en un cuarto de baño con paredes de azulejos rosas. La habitación está llena de plantas y arte, creando un santuario elegante, caprichoso y personal.
Ilustración de un gato negro sentado sobre una alfombra estampada en un cuarto de baño con paredes de azulejos rosas. La habitación está llena de plantas y arte, creando un santuario elegante, caprichoso y personal.
"Pinto los trozos de sueños que olvidamos demasiado rápido, los que perduran entre el sueño y la memoria."
Desdibujando la línea entre lo real y lo imaginario, mi arte invita a entrar en espacios liminales. Me atraen las atmósferas surrealistas, los contrastes vibrantes y ese espacio mágico entre la vigilia y el asombro.