Un gato blanco se sienta tranquilamente en el rellano de una escalera exterior de un edificio de paredes rosas. La escena, de líneas limpias y arcos, es una instantánea arquitectónica serena, minimalista y encantadora.
Un gato blanco se sienta tranquilamente en el rellano de una escalera exterior de un edificio de paredes rosas. La escena, de líneas limpias y arcos, es una instantánea arquitectónica serena, minimalista y encantadora.
"Crear es explorar lo desconocido, hacer preguntas a través de los colores y dejar que las respuestas permanezcan abiertas."
Abordo cada obra como una meditación sobre el tiempo, la identidad y la propia existencia. Las herramientas pueden cambiar, lápiz, pincel o estilete, pero el objetivo permanece: preguntar y escuchar.